Simplemente esto es para animaros y para que vayáis a por todas en Logroño.
"No hay excusas (no hay excusas)
No vamos a retroceder (no hay disculpas)
No tenemos miedo (no hay excusas)
Ni una gota de dudas.
Tan sólo necesitas arriesgar y ya está..."
El CD Valladolid de GR es un club deportivo cuyo fin principal es la práctica de la Gimnasia Rítmica por parte de las niñas que lo componen. Así a parte del trabajo y esfuerzo que ponen en ello y de los excelentes resultados conseguidos a lo largo de estos últimos años, su otra finalidad es que se diviertan y disfruten de compañeras y entrenadoras. Consiguiendo por tanto el éxito más importante: AMISTAD y COMPAÑERISMO.
Para que disfrutéis de la exhibición de TODAS nuestras niñas, y del excelente trabajo de TODAS nuestras entrenadoras.
Ahora toca rematar la faena a nuestras Juniors. Que seguro lo van a hacer genial.
"Conoces a mucha gente y a niños de otros sitios. Las niñas vienen encantadas, además es buenísimo que hagan deporte", afirma Carmen Fernández, madre de una niña cadete del club Gimnasia Calpe.
Ataviada con una camiseta color verde pistacho y rodeada de otros familiares del club comenta que han venido un autobús y coches particulares.
"Es la primera vez que venimos a Valladolid, pero sí hemos ido a otros campeonatos. Viajamos siempre, padres, hermanos, abuelos tíos... ¡todos! porque es una ilusión, además si el resultado es bueno, merece la pena", dice mientras confirma el gasto económico que supone el desplazamiento y el hotel.
Entre gritos de ánimo y aplausos, apenas se puede oir por megafonía el club que va a actuar, pero el público no se pierde un ejercicio, incluso van tachando en la lista de participación por dónde van. En las gradas también se puede distinguir una gran variedad de acentos, porque hay participantes de casi todas las comunidades autónomas de España. Las que más llaman la atención son las tinerfeñas del Club Taina que llevan un forro polar lila y van ataviadas con guantes y bufandas que les tapan media cara.
Puestos de ropa y fotografías
Además, no pueden faltar las barras para tomar un café y un bocadillo para reponer fuerzas, un stand donde se vende la camiseta del Campeonato a ocho euros, y varios puestos con ropa, mazas, pelotas, ganchitos para el pelo, llaveros, sombras de ojos, purpurina y un sinfin de cosas que a las niñas les encanta y convencen a las madres para comprar. También hay un puesto de fotografía, con unos ordenadores donde las gimnastas buscan su ejercicio y compran la instantánea profesional.
Las fotos son protagonistas del campeonato, no sólo los familiares, sino las propias entrenadoras hacen fotos a las gimnastas antes y después de salir al tapiz. Este momento es muy especial. A las pequeñas se las ve nerviosas calentando, pero ahí están los técnicos para darles todo su apoyo. Besos, muchos besos, respiran profundo, suerte y....¡acción! Ellas las miran desde un lado, nerviosas también, pero orgullosas, y satisfechas. Y al acabar, otra vez lo mismo, besos y abrazos, aunque también palabras de consuelo para aquellas que salen llorando impotentes si tuvieron algún fallo.